Soy la playa

La canción de las 15:18. El nombre de este proyecto musical no me puede gustar más. Antes, cuando solo andaba por ella, no estaba mal, pero ahora, ya provecto, sueño con tirarme allí y que pase el tiempo. Yo soy la playa, mucho mejor que aquel que le dijo que era su padre a no sé qué otro. Paco Medina, un tercio de los malagueños Airbag, está detrás, delante y a los lados, de este fresquísimo Un cohete sube al cielo.

Mute

La canción de las 14:31. Cuando en 2004 Jorge Valero, Ángel Boronat, Víctor Prieto y Carlos García se juntaron en Aspe (Alicante) para hacer música, casi nadie utilizaba la palabra Mute. Algo después, tampoco, pero mucho después, y con una pandemia de por medio, ya sí. “Estás muteado“, te dicen cuando en una de esas interminables reuniones cibernéticas de hoy, intentas hablar y nadie te escucha. “Desmuteate“, te piden, haciendo gala de esa enfermiza manía de importar ridículos anglicismos que, eso sí, deshace patrias. El caso es que lo nuevo de los Mute es fantástico. Su brillante e intenso guitarreo de siempre se hace acompañar en este adictivo Grandes amistades de la portentosa voz de Laura Prieto, conocida también por formar parte de los cada vez más imprescindibles Rusos Blancos.

Yung Prado

La canción de las 15:54. Datos objetivos, aunque relativos: es martes, de día y hace calor. Por pura contraposición, ni es sábado, ni es de noche. Pocas posibilidades, por tanto, para, ahora mismo, bailar ritmazos electrónicos. Guardad este del barcelonés Nil Roig en vuestro disco duro y ponedlo en cuanto haya ocasión. Preguntad por Yung Prado, que suele contestar rápido.

Pedro Pastor y Los locos descalzos

La canción de las 14:09. Mi Kevin Roldán particular fue Pedro Pastor. Con él, con un concierto suyo en mi Salamanca natal, empezó casi todo. Y fue precioso. Casi diez años después de aquello el hijo de Luis Pastor, el sobrino de Pedro Guerra, continúa haciendo canciones llenas de sentimiento. El mar, acompañado de Álvaro Navarro, Nico Martos, Alan Denis y Gustavo Guerrero, esto es, los talentosos locos descalzos, es la última demostración.

Meritxell Neddermann

La canción de las 14:24. Imagino que fue el sol portugués el que me cambió. Supongo que también el mar de los atlánticos tuvo algo que ver. No se me ocurre combinación mejor. El caso es que al regresar a la música fijé mis oídos en esta fantasía de la catalana Meritxell Neddermann, hermana, no es mucho imaginar, de la talentosa Judit. Suelta, se titula. Eso hago.