La canción de las 14:09. Mi rutina otoñal comienza el día en el que, para comer, me hago pasta con tomate. La frase, así escrita, pues eso, sin más. Ahora bien, si me llamara Pablo Arnal, fuera de Zaragoza, hubiera optado por el discutible Estallo como apellido artístico y, sobre todo, tocara la guitarra y cantara de modo estupendo, todo cambiaría. Hasta para que se me haga insoportablemente corto este minuto y medio de macarrones con tomatico. Lo que es el talento y lo que no.