La canción de las 16:04. Me pregunto si seguirán vendiendo chicles de fresa ácida. Eran mis favoritos, pero ni siquiera por el sabor, sino porque eran los únicos que duraban algo más que un suspiro. Los de menta tampoco me gustaban. Me pasa lo contrario con la primera canción que conozco de este sexteto así llamado, Menta, que cantan a la mierda que es ser joven; la misma, esto ellos aún no lo saben, que es ser mayor. Ojalá te mueras, dicen. Cualquier cosa menos ambages, eufemismos y metáforas. Si hubieran conocido el mítico chicle Boomer estarían algo más contentos. Sin duda.
Mes: PMñ2020 f02262020-04-15T15:02:26+01:00pmmiércoles
14 de abril. Rotrhigo
La canción de las 14:16. Ayer fui increíblemente hábil al sospechar que detrás de Irenegarry debía existir alguien llamado Irene. La susodicha me lo confirmó vía redes sociales que es como se atestiguan ahora las sospechas. Me encantaría que hoy me sucediera algo parecido con este Rotrhigo, al que imagino Rodrigo en su vida común. También lo imagino componiendo en la soledad de su dormitorio, él solito, con sus manitas y sus abalorios, haciendo temas, de alegría instantánea, como este adictivo Up and Away.
13 de abril. Irenegarry
La canción de las 14:25. No lo contéis, pero viajé en estas vacaciones. Necesitaba hacerlo y, por eso, me fui. Del salón, ni siquiera en un ángulo oscuro, sino directamente del salón al cuarto de baño. Pero me cundió y tengo para contar anécdotas que no cabrían en un libro gordo. Regreso a la música, a la nueva y nacional, a esa que no suena ni en cuarentena confinada, ni tampoco en confinamiento acuarentenado. Imagino que Irenegarry se llamará Irene, aunque ni de eso estoy seguro. De lo que sí estoy es que tiene hermosa voz. Y con eso, en este lugar, suele bastar.
8 de abril. Biig Piig
La canción de las 17:29. Regreso momentáneo y saltándome una de las reglas ni escritas, ni habladas, ni siquiera pensadas de este modesto blog de música e ilusiones. Jess Smith es una jovenzuela irlandesa (de ahí, la trampa), que creció en España (aquí, la ley), que me atrapó esta tarde pre-loquesea con este trallazo sideral. Nota: Se hace llamar Biig Piig por una lectura etílica de un menú de pizza. Brillante.
6 de abril. Santoral
La canción de las 17:02. No falla. En Semana Santa llueve. Estemos en la calle esquivando las procesiones o metidos en casa confinados como en las pelis. Es primavera y el habitual tiempo gallego de las cuatro estaciones en un día se hace más universal aún. Los santos de hoy atienden a nombres tan raros que prefiero fijarme en los zaragozanos Alberto Solobera y Elvira L. Vallés, componentes del santoral más rítmico. Con ellos, y con su loco medieval, viendo llover detrás de la ventana, me quedo.
4 de abril. Luis Eduardo Aute
La canción de las 14:41. En triste época de números por fallecidos, hay uno hoy que tiene nombre y apellidos. Se ha ido Luis Eduardo Aute, muy enfermo desde el infarto que sufrió hace más de tres años. Nunca fue de mis favoritos. Le vi una vez, junto a Silvio Rodríguez en Las Ventas, y aquello fue bonito, mas a la entrada entregaban gratis hojillas para cortarse las venas. Pero, indudablemente, dejó cancionacas de valor. Al margen de las antológicas, siempre me gustó este ligero Slowly, con el que parecía querer quitarse peso e importancia. Y eso siempre es bueno.
1 de abril. Nueva Vulcano
La canción de las 17:47. No todo son malas noticias para empezar el mes de abril. Nueva Vulcano han sacado nueva canción y yo, a los autores de ese pelotazo sideral de poco más de dos minutos llamado “Te debo un baile”, les espero siempre con deseo. Desde Barcelona, con su estupendo estilo de siempre, ponen letra e imparable ritmo a eso que a todos nos ha pasado alguna vez. “Fui fan de Hal Hartley / pero el plan de esta tarde / es Disney y resaca padre”, cantan. La vida misma. (Y eso que Amateur, aquella peli de Hartley con esa monja que se salía del convento y escribía relatos porno, tenía bastante gracia).