19 de noviembre. Daniel Rosell

La canción de las 10:53. Escucho de vez en vez esta joya de Daniel Rosell y cada vez que lo hago más me gusta. Ni siquiera necesito el aderezo visual que la ilustre para volver a confirmar que en la sencillez está el mejor de los gustos. Escribiría aquí mismo la letra completa de “Vengo hasta aquí” porque me parece una auténtica preciosidad, pero si lo hiciera os adelantaría la belleza y prefiero que la descubráis vosotros mismos por aquello de disfrutar del camino.
http://danielrosell.bandcamp.com/track/vengo-hasta-aqu

18 de noviembre. Second

La canción de las 9:57. Lo más cerca que jamás estuve de Murcia fue un día que pasé junto a un cartel que ponía Murcia 124. Y hasta ahí llegué. Es posible que una de las pocas excusas poderosas que harían que me adentrara en aquella que tildaban de qué hermosa eres sea la música. Otra de las numerosas bandas que proceden de allí y que escucho con mucho más que agrado son estos Second. “Montaña Rusa” es su séptimo disco. Me suenan a muchas cosas, pero casi todas ellas me gustan.

17 de noviembre. Night Ark

La canción de las 11:21. Si hoy, como domingo que es, hubiera hecho la limpieza semanal de mi casa, es más que probable que me hubiera vuelto a tropezar con uno de los CD’s (¿o se escribe cedés?), más extraños de mi particular colección. Músicos armenios, con algún que otro yanqui infiltrado y con el talento y el virtuosismo por nacionalidad común, formaron este grupo, Nigth Ark, con melodías y ritmos brillantes como pocos. Solo falta en esta versión la voz griega de Elefteria Arvanitaki para elevar este “Dinata Dinata” a cotas infranqueables.

16 de noviembre. Mishima

La canción de las 10:34. Mucha de la mejor música de este país, o de aquel otro, vayan ustedes a saber, me sigue llegando desde Cataluña. Y a borbotones. Mi propuesta sabatina es esta “L’ultima ressaca”, huelga la evidente traducción, de los barceloneses Mishima, cuyo nombre remite al escritor nipón de curiosísima existencia. Japón y Cataluña. No suena nada mal la combinación. Tampoco ellos.

15 de noviembre. Doctor Divago

La canción de las 11:41. Si yo fuera médico me haría llamar Doctor Divago, como estos veteranos del rock valenciano, que ya van por su décimo disco en el mercado. Referencias cinéfilas aparte, algo tiene que ver divagar con dudar y la duda es lo único capaz de mover al mundo. Huid conmigo de seguridades, verdades absolutas, convicciones invariables e irreductibles consecuentes. Hacedlo escuchando rock del bueno.

15 de noviembre. Doctor Divago

La canción de las 11:41. Si yo fuera médico me haría llamar Doctor Divago, como estos veteranos del rock valenciano, que ya van por su décimo disco en el mercado. Referencias cinéfilas aparte, algo tiene que ver divagar con dudar y la duda es lo único capaz de mover al mundo. Huid conmigo de seguridades, verdades absolutas, convicciones invariables e irreductibles consecuentes. Hacedlo escuchando rock del bueno.

14 de noviembre. Them Crooked Vultures

La canción de las 13:03. Los lobos han vuelto a bajar al pueblo y a su paso me presentan esta brutalidad hecha música. Ojo a la alineación titular de estos Them Crooked Vultures. A la batería, con el número 1, Dave Grohl, ex Nirvana y Foo Fighters. A la voz, con el 2, Josh Homme, cantante de The Queens of the Stone Age. Al bajo, uno de los más grandes, una leyenda viva, John Paul Jones, recién fichado de los mismísimos Led Zeppelin. Un potente impacto, un golpe de lleno, lo necesario para huir, al menos por un momento, de culpables sin condena.

13 de noviembre. Liam O'Flynn & Mark Knopfler

La canción de las 10:47. La joya brutal que acompaña estas líneas la compuso el genial Liam O’Flynn para inaugurar, en 1997, el mandato presidencial de Mary McAleese, que quiso comenzar así su liderazgo en Irlanda con voluntad de consensos y alianzas entre enemigos casi irreconciliables. Se titula “El puente”, “An Droichead” en el imposible gaélico, y ya podrían tomar buena nota de tan encomiable encargo nuestros ínclitos héroes Rubaljoy y Rajalcaba. Dicen que la gaita irlandesa es uno de los instrumentos más difíciles de tocar y que dominarla es misión casi imposible. A solo dos metros de O’Flynn pude un día de hace muchos años confirmar esa extrema dificultad. Para completar el círculo de la inmensa belleza, la guitarra eléctrica corre a cargo de mi mayor héroe de juventud, el simpar Mark Knopfler. Si escuchándolo no sentís irrefrenables ganas de marchar a Irlanda para probablemente no volver jamás, os doy permiso para pillaros un apartamento con vistas en la mismísima Marina D’Or.

12 de noviembre. The Wave Pictures

La canción de las 11:17. Ten amigos para compartir música con ellos y para que te abran los ojos. La ignorancia es muy atrevida y la mía en particular, atrevidísima. Me descubren a The Wave Pictures y, cual vaso comunicante, lo ofrezco como el mejor presente mañanero que se me pudiera ocurrir. Inglesitos procedentes de la mismísima Tierra Media, llevan haciendo discos de manera compulsiva desde hace 15 años. Este fantástico “Red Cloud Road” es lo último… de momento.