La canción de las 14:09. Hace unos cuantos añitos vi a tres chavales gallegos actuando sobre el escenario de mi añorado Ebrovisión. Tocaban sin bajo, hacían mucho ruido y yo no estaba preparado para tanto. Ellos han cambiado y yo no me he quedado atrás. Busco información sobre su último disco, “Cálida” se llama, y tropiezo con la expresión que más odio en este momento. Resulta que quien escribe dice que para hacerlo “han salido de su zona de confort” y, al instante, otro gatito muere en algún lugar del mundo. Añagazas literarias aparte, confirmo que es un trabajo fantástico. Este potente “Pequeño drama” lo atestigua.